Empecé con sus ilustraciones un 1 de octubre de 2015. Una fecha que no olvidaré porque hubo un cambio importante en mi vida, un punto de inflexión. Y además fue el comienzo del Inktober más fructífero en el que he participado.
UN COLOR MUY GRANDE
Las ilustraciones comenzaron sin nexo, solamente los colores: el rojo y el negro. Dos colores que significan mucho, cuentan mucho. El negro es el color INK básico en el Inktober y el rojo para mi es pasión, calor, magia, sangre que fluye y da vida, sabor... por eso elegí este color tan grande.
Así que es posible contar visualmente una historia con tan solo dos colores. Y no se trata de una historia banal, sin trasfondo ni aburrida. Es una historia precisamente llena de sentimiento. ¡Adiós capitán! narra la pérdida de un ser querido. En este caso es un abuelito que adoraba, amaba enormemente a su nieto.
Pero podemos trasladar esta historia para explicar la falta infinita, la ausencia de un ser querido.
Como os contaba, las primeras ilustraciones no fueron pensando en la historia. La historia surgió gracias a las imágenes. Normalmente en el mudo de la literatura infantil suele ser al revés. Tenemos una historia narrada, un texto y de ahí salen las imágenes que acompañan al texto. Normalmente... no siempre ocurre en este orden.
Aunque he de decir que no me gusta mucho el término acompañar. Al menos en mi caso, desde mi experiencia quiero siempre hacer algo más que acompañar al texto, ya sea mío o de un compañero escritor. Creo fielmente que tanto en la literatura infantil como en la juvenil las ilustraciones juegan un papel verdaderamente importante que además de acompañar al texto, tienen que enriquecer, aportar, añadir, dar lugar a la reflexión...
De hecho tengo en mi "cuaderno de cosas-pendientes-importantes-por-hacer", crear una historia gráfica sin texto, sin letras bailando alrededor de las imágenes llenas de color.
CRÍTICA A RESEÑAS SIN SESO
Aprovechando este mini-speach sobre la relación imágenes y texto me gustaría hacer una CRÍTICA importante de algo que sucede en las reseñas que se cocinan para redes sociales sobre un álbum ilustrado. Me encuentro últimamente demasiadas veces con reseñas en las que solo aparece el autor de la historia y ni se menta al ilustrador. ¡Mucho cuidado con esto porque es una falta de educación garrafal!.
Los álbumes ilustrados están compuestos IGUALMENTE POR ILUSTRADOR Y ESCRITOR. Imágenes y texto se complementan.
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Estamos ya en el sigo XXI y creo que debería de normalizarse esta situación: LOS ÁLBUMES ILUSTRADOS SE COCINAN CON DOS CHEFS, NO CON UN CHEF Y UN PINCHE.
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Según fue avanzando el Inktober fue surgiendo la historia pero os puedo contar que tal vez fue después de 15 o 20 ilustraciones. El personaje siempre era el mismo y creo que mis ilustraciones inconscientemente fueron escribiendo la historia.
INKTOBER
Si me permitís, voy a hacer un copia-pega del señor google que en este caso lo explica perfe.
Inktober es un reto creado por Jake Parker en 2009 como un reto a sí mismo para implementar sus habilidades en materia de ilustración. El reto consiste en publicar en tu blog o redes sociales un dibujo a tinta (o lápiz) diferente cada día durante el mes de Octubre y etiquetarlo con el hashtag #inktober.
INK (tinta en inglés) + tober (parte de October, Octubre en inglés)
Y ateniéndonos a esto tampoco hay mucho que explicar sobre la técnica que utilicé porque es obvio. Tinta china y acuarelas.
Me encantaría enseñaros, como en otras publicaciones, los bocetos o el story del libro pero en el Inktober fui muy osada y cada imagen la pintaba directamente. Papel y osadía... (jajajaja)
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Solo espero haberlo conseguido. Y por los mensajes que he recibido creo que la cosa va muy bien...
¿Cómo es posible tocar emocionalmente a alguien que no conoces?
Pues eso es precisamente lo que recibo de todas las reseñas y comentarios de mi querido ¡Adiós capitán!, mensajes emocionados y agradecidos.
Por supuesto mil gracias Alicia, querida editora, por ayudarme a hacerlo más bonito.
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